No había cómo poder seguir adelante. Lo de Arturo Díaz en la vocería de Gobierno era insostenible. No tenía vuelta, y aunque su deseo era mejorar su gestión como secretario ministerial la delegada presidencial, Luz Bermúdez, le pidió la renuncia.
Algo que fue complejo según fuentes cercanas, por los vínculos políticos que unen a Bermúdez y Díaz, pero que era absolutamente necesario.
Y aunque el ex vocero le dijo a sus cercanos que él había renunciado, lo cierto es que esa no fue la realidad. A casi ocho meses de asumir el Gobierno de Gabriel Boric a nivel local el peor desempeño por lejos lo tuvo el ex concejal y ex candidato a alcalde. Malas decisiones, pero por sobre todo el desconocimiento total del trabajo comunicacional lo llevaron a ser sacado del gabinete. Simplemente sin talento para hacer llegar el mensaje del ejecutivo, y menos de tener cercanía con la ciudadanía.
Así también lo entendieron desde Santiago, y por supuesto la delegada presidencial.
Desde los partidos habría un consenso para que sea Andro Mimica (PS) el futuro vocero. Escenario igual de complejo si es que se da, ya que la cantidad de integrantes de la familia Mimica en el Gobierno de Boric podría no ser tan bien vista por la ciudadanía. Además del poco vínculo político entre el mundo frenteamplista y el hijo del ex alcalde Vladimiro Mimica. En todo caso, no habrían muchos más nombres puestos sobre la mesa para que la delegada tome la decisión. Cuestión que se haría antes del 7 de noviembre. Fecha en que deja el cargo oficialmente Arturo Díaz.
El problema para Convergencia Social, que no ve con tan buenos ojos la llegada de Andro Mimica a la vocería, es que en su propia tienda no tienen más gente para poder asumir el cargo. Y esa sí es una realidad.
Pero no solo sería la Secretaría Regional Ministerial de Gobierno la que está en la mira. Se habla de que hay dos o tres seremías más que podrían sufrir modificaciones en los próximos días. E incluso, hay mucha preocupación respecto al tema de seguridad ciudadana y cómo se están entregando los mensajes en términos comunicacionales, y de la gestión propiamente tal. Por lo que no sería raro que haya novedades con la coordinadora de Seguridad Pública, María de los Ángeles Flores, de bajísimo desempeño desde su llegada.