Un extraño punto de prensa fue al que se citó en la Delegación Presidencial durante esta jornada. Posterior a una reunión entre las autoridades de Gobierno y los representantes de los trabajadores de Nova Austral en Porvenir, Luz Bermúdez se paró frente a la prensa y como si fuera una disertación en el colegio, leyó un comunicado a los presentes y luego anunció al vocero de Gobierno, Andro Mimica, para que respondiera las preguntas de los medios de comunicación. No habló más. Una escena que no se había visto anteriormente. Como sacada de una sátira, o un sketch (Escena breve, normalmente cómica, que con otras de las mismas características se integra en un conjunto teatral), donde faltaron preguntas, pero sobretodo respuestas, y explicaciones.
Casi como olvidando el acuerdo celebrado por la misma delegada presidencial hace poco más de una semana, Bermúdez afirmó en su lectura que «se ha avanzado en identificar los medios que permitan que las y los trabajadores de esta industria tengan continuidad en sus empleos. Se ha informado que existe la disponibilidad de dos centros de cultivo viables de recibir la siembra de la especie que pueden ser utilizados en un plazo útil y de acuerdo a lo informado por la propia empresa para las operaciones de cultivo».
Es decir, la propuesta que la propia representante de Gobierno había hecho, había quedado en el olvido… Luego, continuó diciendo que «la empresa debe necesariamente mejorar su gestión y respetar la legislación vigente en materia medioambiental y laboral, así como cumplir sus compromisos financieros.
El Gobierno invita a que –a través del diálogo y el respeto- los actores involucrados trabajen con
responsabilidad, y llama a evitar la circulación de información inexacta que solo genera
incertidumbre entre quienes ven amenazado su puesto laboral y en la población de Tierra del
Fuego y, en particular, de Porvenir».
Es decir, la gestión de la delegada no resultó, y debió cambiar de estrategia para afrontar la situación con los trabajadores. Al mismo tiempo, responsabilizó por completo a Nova Austral de todo lo que estaba ocurriendo: «Insistimos, la continuidad de las operaciones de la empresa depende fundamental y
exclusivamente de la correcta gestión de sus gerencias, a través del respeto a las normas
medioambientales, sociales y a las regulaciones propias de la industria, materias en la cuales la
empresa seguirá siendo fiscalizada por los organismos pertinentes».
Terminada la lectura, dio media vuelta y dejó el espacio para que el vocero Mimica tomara la palabra y respondiera como indica el manual. No más que eso. La verdad hubiera bastado con solo el comunicado, si la idea era que Luz Bermúdez no contestara preguntas.
La caravana vehicular del domingo en Porvenir sigue en pie, y habrá que esperar las reacciones públicas de los trabajadores y de la propia empresa pesquera respecto de la nueva propuesta del Gobierno.
