“Desde hace varios meses, he sido víctima de un comportamiento inusual en redes sociales por parte del colega Alejandro Riquelme, quien ha mencionado repetidamente en sus cuentas de Instagram y Facebook tanto a mí como a mi madre, en un constante e infructuoso intento de interpelación y desacreditación. Me parece relevante evidenciar otros comportamientos de este consejero, especialmente en las comisiones que me toca presidir, donde ha hecho caso omiso a los intentos de llamado al orden y donde ustedes mismos colegas han sido testigos de sus abruptos intentos por apropiarse de la palabra, interrumpiendo a quienes hablan, incumpliendo nuestro reglamento, dificultando el diálogo, expresándose en un tono que personalmente considero inadecuado e incluso golpeando la mesa, evidenciando así comportamientos decimonónicos y hasta violentos, que yo misma creía erradicados de espacios como en el que hoy nos desempeñamos”; Es tan solo parte de la intervención de la consejera Ximena Montaña, quien acusó al core Alejandro Riquelme de violencia política de g;enero y persecución en sus redes sociales. Algo sencillamente inentendible, y grave a la vez. Y que llama a reaccionar al Consejo Regional en su totalidad, sin excepciones.
A su vez, desde la Coordinadora Feminista de Punta Arenas se señaló que estas conductas por parte del consejero regional también se han llevado a cabo hacia ellas, interpelándolas con mensajes privados y públicos en sus redes sociales: “Ximena y nosotras mismas hemos sido víctimas de su hostigamiento básicamente por identificarnos feministas de izquierda. Hemos visto cómo este pseudo político se agarra del machismo que nos habita como comunidad, justamente para hostigarnos, ensuciando nuestra imagen ante una sociedad que muchas veces nos mira con sospecha, como ‘extremistas’, cuando a lo sumo conocen lo que ven en medios que cuentan la historia desde el punto de vista de los hombres”, declararon.
Desde la Comisión de Género del Colegio de Periodistas de Magallanes, también señalaron situaciones similares: “Sabemos que en la actualidad, el solo hecho de llevar a alguien a Contraloría o publicar su sueldo sabiendo que más de la mitad de Chile gana el sueldo mínimo, busca generar odiosidad contra un grupo de personas, pero no logra nunca establecer ninguna responsabilidad. Utiliza la cuña fácil alimentando el populismo para lanzar el manto de la duda, entregando declaraciones destempladas por medios de comunicación de derecha e incita a sus seguidores por redes para seguir levantando discursos de odio contra feministas y grupos históricamente marginalizados”.
A su vez, el consejero Riquelme a verse interpelado envió a los medios locales una especie de autoentrevista, donde desde su punto de vista intentó justificar sus actos, pero concluyó diciendo que seguirá asumiendo las mismas acciones: «El Consejero Riquelme utilizó su derecho réplica y manifestó a los acusadores que: “… no importando si crean una, dos o tres comisiones de ética; voy a seguir ejerciendo mi labor fiscalizadora y mi libertad de expresión en este consejo y en las Redes Sociales”. Además, les recordó, que: “… el derecho a libertad de expresión sin censura previa y de manifestarse pacíficamente, son derechos constitucionales” .