Colombia recibe al primer gobierno izquierdista en su historia con la promesa de alcanzar la paz

7 de agosto de 2022

Jefes de Estado, cancilleres y otras autoridades de varios países llegaron este sábado a Bogotá para asistir a la ceremonia de investidura del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, y la vicepresidenta Francia Márquez, un acontecimiento histórico al tratarse del primer mandatario de izquierda del país.

En la última jornada, Petro y Márquez protagonizaron una ceremonia de investidura «popular y espiritual» ante miles de personas llegadas a Bogotá desde los territorios más desfavorecidos y golpeados por el conflicto, donde se presentaron para recibir también el «mandato popular».

De hecho, Petro quiso subrayar justamente ese factor: que él iba a ser el mandatario, pero que quien ordena el mandato es el pueblo, por lo que llamó a «más y más organización popular en toda Colombia».

«Este camino no empezó en una campaña electoral, este camino empezó en la resistencia de los pueblos, resistencia que se ha mantenido en más de 500 años, que a muchos les ha costado la vida, que a muchos les ha costado el exilio y que a muchas mujeres nos ha costado casi todo», dijo, en la misma línea, la vicepresidenta electa.

En lo que va de año se han producido 60 masacres, según el recuento del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), que en su observatorio también recoge que han sido asesinados 110 líderes sociales en 2022 y 1.337 desde que se firmó la paz.

Petro llegará mañana a la Casa Nariño -residencia oficial del Presidente de Colombia- con la promesa de la «paz total» con la que quiere, además de lanzar mecanismos urgentes de protección en las regiones, comenzar o retomar negociaciones con diversos grupos armados como la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

El hecho que el ELN haya mostrado su voluntad de volver a sentarse a la mesa o que el Frente Primero de las disidencias de las FARC también haya hablado de dialogar para lograr un cese al fuego bilateral son signos que la gente ve como muy positivos.

La elección como vicepresidenta de Francia Márquez, una mujer de un pueblo negro del Cauca, que nació en las clases más excluidas, los que llama «nadies», ya es una esperanza, aunque se mostró precavida: «Tenemos que tener claro que no vamos a cambiar 500 años de opresión y exclusión en cuatro años, pero colocaremos la base de una transformación en favor de la vida, en favor de la paz, de la justicia social, de la justicia racial, de la justicia de género, de la justicia económica», afirmó.

«Aquí estoy lista para cogerme de la mano de ustedes para caminar este ejercicio de gobierno que no será fácil porque tenemos la élite más peligrosa de la región, una élite que se ha encargado de mantenernos (…) en el hambre, en la violencia, en la exclusión», dijo Márquez, que convocó «a un gran acuerdo nacional que ponga las bases de una nueva nación«.

También Petro se refirió a esa alianza, asegurando que, a pesar del impulso que le han dado las organizaciones sociales, campesinas e indígenas, éstos no quieren que el gobierno reemplace el movimiento popular, sino más bien establecer una interlocución constante.

«Se trata de inaugurar un Gobierno con los movimientos sociales, no un Gobierno sobre los movimientos sociales y mucho menos un Gobierno que extinga los movimientos sociales», dijo Petro, que subrayó que esa es la «construcción de una nueva democracia» porque «nunca se ha vivido en el país lo que llamamos una democracia multicolor».

Escrito por: Redacción ZonaZero