El Centro Antártico Internacional (CAI) es un anhelo que puso en la mesa en su paso como intendente de Magallanes, el actual gobernador regional, Jorge Flies. Y más allá de que el proyecto en su momento fue empujado, e incluso con Flies en la antigua intendencia había avanzado importantes etapas, desde el inicio de la administración de Sebastián Piñera y sus autoridades locales, se mostraron contrarios a sacarlo adelante por diversos motivos y nunca fue prioridad tal cual lo mencionaron desde un principio.
Pero los tiempos cambian, y desde el Gobierno Regional se siguió trabajando en el tema, incluso con reuniones y acercamientos desde el primer día de mandato. Finalmente, este martes se anunció para la región la aprobación del Centro Antártico Internacional. Esto, luego de que tras tres meses de haber ingresado al Ministerio de Desarrollo Social se obtuviera la recomendación técnica para su ejecución.
Al respecto, la máxima autoridad de Magallanes declaró: “Este proyecto parte con el Plan de Zonas Extremas. Había un anhelo en avanzar en este tema en la región por lo que va a significar para Magallanes y el resto del país. Estamos muy contentos. Hemos estado trabajando junto a las autoridades regionales para lograr este objetivo de impulsar este icono arquitectónico”.
La construcción del CAI se llevará a cabo en el sector de la punta arenosa (curva de la Costanera, ex Chipera) y contaría con un modelo de gestión donde el rol principal lo tendría el INACH.
Cabe mencionar, que el proyecto estará emplazado en más de 32 mil metros cuadrados y donde habrá
un edificio central, un museo interactivo, diversos laboratorios, área de logística, y salones de conferencias, entre otros.
Una vez concluido este plan, Punta Arenas y la Región de Magallanes le ofrecerán al mundo la posibilidad tener capacidad logística para el movimiento de buques antárticos, infraestructura de laboratorios para los países que participan de las investigaciones científicas en el Continente Blanco, y un espacio interactivo a través de la museografía a la comunidad. Todo esto, reafirmando el concepto de que Punta Arenas sea de una vez por todas la puerta de entrada hacia la Antártica.
