Posterior a la Reunión de Política Monetaria de septiembre, el Consejo del Banco Central decidió bajar la Tasa de Política Monetaria en 75 puntos base hasta 9,5%.
Esto en línea con las expectativas del mercado y las recomendaciones del Grupo de Política Monetaria.
Desde el ente rector destacan que “la inflación ha continuado disminuyendo a nivel global, aunque sus perspectivas y las de política monetaria difieren entre países”, con algunos pronosticando una mirada más restrictiva y otros que ya comenzaron su ciclo de recortes (como Chile).
Citan también el “menor apetito por el riesgo” a nivel global, la incertidumbre respecto al desempeño económico chino y el fortalecimiento del dólar.
A nivel local, la actividad y la demanda evolucionan acorde a lo esperado por el Consejo, a la vez que el consumo privado se estabilizó.
Destacan a su vez el Imacec de julio, que demostró un desempeño más positivo, “aunque asociado principalmente a factores transitorios que afectaron a la generación eléctrica y los servicios personales, entre otros”.