El ex alcalde Fernando Paredes tenía, y esto puede sonar extraño, más de una “mano derecha”.
Alejandro Velásquez, ex secretario general de la Cormunat, era uno. Freddy Sobarzo Ojeda, ex director de Finanzas del mismo organismo, es otro. El mismo Freddy que fue detenido en Santiago por ejercicio ilegal de la medicina. Otra historia.
Cada uno contó su versión de los hechos cuando el vínculo con Paredes se debilitó. Con la anuencia de Paredes, Velásquez recibió unos 43 millones de pesos de una indemnización firmada un domingo. Fue por un cambio de rol en sus labores. Aunque después se rebeló e inició una causa por daño moral contra su ex jefe por otros 60 millones.
Sobarzo, un alfil, fue denunciado por la misma administración Paredes por fraude al traspasar alrededor de 28 millones de las cuentas del municipio a la suya propia. En diciembre el ex funcionario deberá enfrentar a la Justicia por primera vez, pero ya había anticipado al periodista Mauricio Vidal en su programa BDR, que él era testigo y parte de numerosas maniobras poco claras emprendidas con dineros municipales bajo la mirada atenta de Paredes.
En ambos casos hay capítulos y quizás temporadas por delante.
Una tercera mano derecha del organismo Paredes podría ser Julio Saldivia. Se trata de un hombre de diversos talentos que fue chófer del ex alcalde, fotógrafo, encargado de comunicaciones, de relaciones públicas, estratega político, animador y siguen los cargos.
Resulta que Saldivia fue cesado de su labores cuando llegó la nueva administración de la alcaldesa Antonieta Oyarzo. Es sabido que los equipos de comunicación de los municipios son considerados de “confianza” por lo que no suelen permanecer en sus puestos una vez que se ha producido un cambio de gobierno.
Saldivia, que ingresó al municipio con el ex alcalde Mario Margoni siendo muy joven, demanda ahora que el municipio le debe 34 millones de pesos por sus 14 años de servicios. Su hoja de ruta indica que entre 2007 y 2020 se desempeño en el área de comunicaciones y ese año fue trasladado a la Cormunat donde terminó despedido.
En el municipio lo recuerdan por su afición a la ropa Lacoste y un vehículo de unos 15 millones de pesos.
Sus abogados argumentan que Saldivia debe recibir unos 18 millones de pesos como indemnización por servicios prestados, otros 11 millones por “daño moral” y otros 5,4 millones en otros ítems.
Los hechos curiosos en el “caso Saldivia” no son pocos. En principio, su abogado es el mismo que representa al ex alcalde Fernando Paredes, es decir, José Luis Pérez Tapia.
Por otro lado, Saldivia ya fue indemnizado por una cifra de 7 millones de pesos, cuenta a Zona Zero, fuentes municipales. Saldivia recibió el dinero y firmó “conforme”. Se entiende que no quedó conforme.
Y, no menos importante, la situación de Saldivia en el municipio fue objeto en 2020 de una investigación y de un sumario por parte de Controlaría Regional, puesto que el ex funcionario tenía doble contrato por funciones similares. En lo nominal Saldivia tenía trabajo a Contrata y a Honorarios por una suma de más de 1 millón de pesos.
Todo esto consta en el oficio ordinario N°4351 de Contraloría General de la República. Según consta en este documento Saldivia cobraba de honorarios 737.571 pesos y por Contrata de 459.279 pesos. Ambas funciones eran ejercidas a media jornada. En la investigación institucional además se apunta que el ex funcionario utilizaba vehículos municipales en horarios que no le correspondían.
En el “universo Paredes” este tipo de faltas administrativas no eran raras ni consideradas especialmente graves.
