Este martes fueron publicados los resultados de la Radiografía Digital de Niños, Niñas y Adolescentes 2021, un estudio que midió el comportamiento, tanto en internet como en el uso de las redes sociales, de jóvenes entre 8 y 17 años, el cual dejó en evidencia la urgencia de educar a los escolares respecto a las oportunidades y riesgos que conlleva el adentrarse en lo digital.
El sondeo, presentado por la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), reveló que menos de la mitad de los menores de 17 años -cinco de cada diez- verifica la veracidad de los datos que publica al compartir información con sus pares, y que apenas un 11% de ellos está familiarizado con el concepto de «huella digital» o el rastro que su interacción en internet deja para siempre. Asimismo, el principal hallazgo de la quinta versión de este informe es el menor grado de consciencia que existe respecto de la importancia de tener hábitos de consumo seguros y el escaso entendimiento de los menores en relación al alcance y duración de su huella digital, o historial de publicaciones y comentarios en la red.
«Nuestro país ha experimentado una intensa transformación digital. Durante los últimos 23 meses de pandemia, las familias chilenas han debido trabajar, estudiar, emprender y comunicarse con sus seres queridos de manera remota. Estas nuevas formas de interactuar y relacionarse a través de la pantalla, ya no requieren únicamente una buena conectividad -que sin duda es fundamental- sino que además precisan de importantes habilidades cognitivas que permitan a los usuarios relacionarse sanamente entre sí a través de la pantalla, haciendo uso responsable de la tecnología», comentó el subsecretario de Telecomunicaciones, Francisco Moreno. Por su parte, Cynthia Soto, gerente de Responsabilidad Corporativa y Sostenibilidad VTR, dijo «vivimos la transformación tecnológica más profunda de nuestra historia.
El objetivo de Fundación VTR es que el mayor número de personas se beneficie con este cambio y sea capaz de administrar la tecnología en su beneficio y en el de su entorno. La Radiografía Digital nos muestra la necesidad de fomentar habilidades, actitudes y valores que se requieren para enfrentar este cambio. Este conjunto de herramientas es lo que denominamos Inteligencias Digitales». Principales resultados La radiografía demostró que el uso de redes sociales en las que se comparte información más personal, como Instragram o Facebook, es mayor entre los 13 a 17 años, y que en este grupo también predomina el conocer gente a través de estas plataformas.
Asimismo, en cuanto a la frecuencia de uso, el 30% de los niños, niñas y adolescentes entre 8 y 12 años se conecta más de 4 horas al día mientras que en el grupo de 13 a 17 años, esa proporción aumenta al 50%. Por otro lado, un 69% de los adolescentes entre 13 y 17 años no conoce el concepto «Inteligencias Digitales», frente al 31% que afirma manejarlo, aunque tampoco existe claridad al momento de tratar de definirlo. En ese sentido, si bien un 84% de esta sección le gustaría aprender habilidades digitales desde que comienzan a vincularse con la tecnología y el internet, los cuidados que mantienen al interactuar son mínimos.
Respecto a las amenazas contra la seguridad cibernética, al comparar con el año 2020, aumenta la ocurrencia de situaciones como el haber sido contactado por personas que no conocen (55%), haber jugado en línea con personas que no conocen (55%), haber sido víctima de burlas (38%), haber visto o recibido fotos o videos violentos (37%) y el haberse burlado de otras personas (21%). Sobre esto, Patricia Muñoz, defensora de la Niñez, explicó que «tanto el Estado como el mundo privado tienen la responsabilidad de, por un lado, brindar un entorno digital seguro para niños, niñas y adolescentes y, por otro, lograr una inclusión digital para todo este grupo de la población».
«La posibilidad de acceder a las tecnologías digitales de forma provechosa puede ayudar a los niños, niñas y adolescentes a ejercer efectivamente sus derechos civiles, políticos, culturales, económicos y sociales. Sin embargo, si no se logra la seguridad e inclusión digital, es probable que se produzcan vulneraciones a sus derechos, aumenten las desigualdades existentes y surjan otras que impidan su uso», agregó.
